viernes, 4 de octubre de 2013

¡¡¡ DANKE BERLIN!!! PEQUEÑA CRÓNICA DE UN GRAN MARATÓN.

¿Por que Berlin?

Hace casi un año, decidí participar en esta maratón por varias razones:
 
- Poder celebrar mis 3 años "corriendo" regalándome un "World Marathon Major" ( los 6 mejores maratones del mundo: Tokyo, Boston, Chicago, New York, Londres y Berlin).
- La posibilidad de conseguir plaza directamente de la organización y sin necesidad de acreditar marca "mínima".
- Y especialmente por tratarse de un coste "viable" al disponer de estancia "gratuita" y vuelos low cost.
 
Ni que decir tiene que tuve que estar muy "al loro" para conseguir el dorsal ya que la demanda es brutal y se agotaron en menos de 4 horas.
 
Despues de marcarme como reto para 2013 completar un "tridente de maratones", Barcelona en marzo, Empúries en abril y Berlin en septiembre, parecía que una vez superados dignamente los dos primeros el tercero no seria dificultoso por el tiempo para prepararlo.No obstante , la época del año en que debes entrenar para un maratón de otoño es el verano, con temperaturas muy altas y humedad asfixiante.Por lo que fue muy duro cumplir con el plan de entrenamiento, máxime teniendo la pretensión de mejorar mi marca , sí o sí, tras haberme quedado tan cerca en los anteriores maratones.

 
La estrategia de la carrera era clara, buscar el sub 3 horas 55 minutos, esto implicaba mantener un ritmo medio de 5'34''/km, durante los más de 42 kms.No era un objetivo tan ambicioso como el pasado año en Valencia, pero es que allí naufragué por forzar demasiado de inicio. A pesar de ser un novato, empiezo a aprender aunque sea mediante el sistema de "ensayo y error".Mi idea era clara , ser conservador y a partir del km 32 leer cual era mi estado y obrar en consecuencia hasta el final.
 
Runners airlines.
 
El viernes 27 de septiembre mi cuñado Albert me hizo de chofer hasta el aeropuerto del Prat.El madrugón no me afectó porque tenia la tensión propia de quien va a disputar un maratón sumada a la  de un viajero poco experimentado en destinos internacionales.
 
Enseguida me di cuenta una vez en cabina que la mayoría de pasajeros acudían a Berlín por la misma razón.Las camisetas, gorras, chaquetas, mochilas y en especial zapatillas de running, descubrían sin duda al pasaje más deportivo que recuerdo.
 
Con una mezcla de ilusión y nerviosismo intenté relajarme durante el vuelo pero no lo logré demasiado.Hasta ese momento y por circunstancias de alta presión laboral especialmente hasta el último día anterior a mi viaje, la experiencia berlinesa había quedado casi como arrinconada, pero suavemente empezó a tomar el control y girar la tortilla. El trabajo pasó a estar aparcado en un rincón muy remoto.
 
Empecé a seguir el consejo de Lurdes a la que tras darle algun que otro argumento de culpabilidad por el viaje en solitario, en vista que la familia no podría acompañarme ,me pedía tan generosamente que lo disfrutase. 
 
Me dí cuenta durante ese trayecto que un humilde corredor popular, con bastantes gastos, familia y un sueldo en declive (como la mayoría de mortales) no tendría demasiadas oportunidades futuras de vivir algo así.De mi año ahorrando raquiticamente moneda a moneda en la hucha pro-Berlin que mi hermana Cheli y sobrinas Lia e Iris me regalaron al acabar en 2012 mi primer maratón .
 
Y así, convencido de saborear la experiencia al máximo tomamos tierra , un airbus de la compañia Easyjet ( aunque yo creo que más bien era de runners airlines), lleno de ilusionados maratonianos y sus acompañantes desembarcando con el fin de conquistar Berlín.
 
Anfitriones de lujo.
 
No se cual hubiera sido el desenlace final de no haber tenido a un par de anfitriones como Ginés y Stefan, pero lo que puedo asegurar es que se encargaron de "todo" y no escatimaron en hipotecar su tiempo para facilitarme cualquier cosa que necesitase.
 
Recogida entorno a las dos de la tarde y comida a mi llegada a su casa.El cambio de temperatura espectacular, 14 grados de máxima cuando el dia anterior habíamos tenido en casa entorno a 28 grados.Tras reponer fuerzas e instalarme, traslado a la feria del corredor ubicada en el antiguo aeropuerto de Tempelhof.

 
 
La "Disneylandia runner", 5 hangares de expositores con todo tipo de gadgets para correr, uno solo para Adidas como sponsor técnico de la prueba, vamos  el paraíso de los "Runners fashion victims".
El gentío era impresionante y me costó un poco acceder a la zona de recogida de dorsales.Una vez allí, fluidez absoluta.Son tan organizados que al enseñarles tu chip amarillo y dni te imprimen el dorsal al momento.Siguiente paso recogida de la camiseta del evento, colocación de la muñequera azul que te permite los accesos al área restringida para corredores el día del maratón y la posterior fiesta en el club Kosmos esa misma noche.Me salté el masaje por cuestiones de tiempo, pero quedé alucinado por la afluencia de público y calidad de la feria, Barcelona ó Valencia son una quinta parte del despliegue berlinés.
 
Sábado de turismo y relajación.
 
 El sábado me desperté muy descansado, había dormido 10 horitas , me sirvieron de reconstituyente ante el desgaste que traía acumulado.Desayuno , mochila y a "patear" Berlin, sin prisas pero si pausas.

No disponíamos de tiempo para ver demasiado solo con media mañana y media tarde , dado que yo pretendía relajarme a a partir de las 18 horas. así que nos dimos una buena vuelta por algunas zonas pero pude ver muy poquita cosa del gran abanico de posibilidades a visitar que ofrece Berlin. De todas formas el recorrido del día siguiente me haría pasar por casi todos los monumentos de la espectacular ciudad.

Naturalmente, comida en un italiano para hartarme de pasta y así cargarme de los famosos carbohidratos que iba a necesitar al día siguiente.A las 10 de la noche ya estaba en la cama, sin poder dormir, pero con todo preparado para el día "d".Dorsal en la camiseta, geles, chip...
 

 

Un domingo cualquiera.

A las 5:30 horas de la mañana suena el despertador, doy un bote y voy a la cocina a tomar un café y mi "pastel energético". Este ha sido un cambio significativo para mí en lo que respecta a los preliminares de un maratón, he sustituido diferentes alimentos de mi desayuno pre-competición: plátanos, miel, cereales...por un pastel especial que contiene todo eso en una sola pieza (+ de 500 calorías) y que no me genera ningún "escape" intestinal ó molestias posteriores.

Luego como un domingo cualquiera en el que me toca rodar 30 kms ó más, vuelvo a la cama y gano un ratito más de descanso para mi cuerpo.

Una hora más tarde, me visto y lleno la bolsa que me ha facilitado la organización con mi ropa de reserva.Despues de darle vueltas, decido competir con una camiseta técnica debajo de la "pastanaga" de tirantes teniendo en consideración que a pesar de que la temperatura a la hora de salida  será bastante baja pero despues puede llegar a los 15-16 grados y sobrarme una "térmica".

Cargo además diferentes complementos, una gorra por si le diera por llover , manguitos para el frío, guantes, buff...vamos que me preparo ante cualquier imprevisto.También llevo el dibujo que me hizo mi hijo Eric y el abrazo de mi mayor Marc.

Curiosamente tomo el metro, es la primera maratón en la que lo hago, en las anteriores siempre estuve como máximo a un par de kms de la salida y me trasladé caminando.Ginés me hace de guia, tras unas pocas estaciones y un transbordo llegamos al área restringida de entrada para los corredores. Comparto destino con cientos de participantes que nos rodean, la atmósfera es espectacular, una torre de babel en movimiento.

40.000 corredores van a tomer parte en la 40 edición de la Maratón de Berlin, eso exige una muy buena organización y despliegue de medios. Me depido de Ginés para adentrarme donde solo unos cuantos nos hemos ganado el derecho a estar , la zona de los maratonianos en uno de los 6 mejores maratones del mundo.Toda información está perfectamente indicada en inglés y alemán, por razones obvias sigo el idioma de Shakespeare.

Enseguida encuentro la zona de guardaropa y el que me pertoca por dorsal.Estoy un poco nervioso y a pesar de ir bien de tiempo, decido "copiar" a muchos corredores que se están despojando de sus chandals y entregando ya la bolsa sin necesidad de buscar las "carpas vestuario".

Entre el gentío y la adrenalina no noto el frío. Me encamino lentamente hacia mi cajón de salida y  oigo que me llaman : "Periku, Periku" (como sabeis es mi nick de corredors.cat) son Joakim i Jaumet, dos correcats que también van a correr la maratón aunque a ritmos más estratosféricos que el mío.Nos saludamos y nos deseamos la mejor de las suertes, luego cada cual a su cajón de destino. A pesar de disponer de muchos baños portátiles , hago un "pipi break" entre alguno de los imnumerables árboles que rodea la enorme zona verde del parque.

Mi cajón es el G y saldré en la segunda oleada junto al cajón F.Posteriormente saldrán el resto de corredores con marca superior a 4 horas.

El marco es incomparable, al frente la columna de la victoria , detrás la puerta de Brandenburgo.La temperatura está en 6 grados, ahora si me muevo para no sentir frío.

El speaker presenta al mítico "Haile Gebreselassie", que habla de la envidia que le damos al disputar este maratón. Despues cumpliendo con el timming de forma impecable da el pistoletazo de salida a las 8:45 horas.

Música y globos, la élite y los participantes hasta marca acreditada por debajo de 3 horas 45 minutos han empezado a correr.

Unos minutos despues, le toca a mi grupo , estoy emocionado, vuelan sobre mi cabeza jerseys, mantas, plásticos...todos se despojan de lo supérfluo.Noto las piernas enrocadas por el frío, por fin paso bajo el arco de salida 14 minutos despues del pistoletazo, garmin en marcha y la gran fiesta de la maratón ha comenzado.

La fiesta del maratón.

El ímpetu emocional y climatológico por el frío hace que deba frenar mi ritmo inicial, el objetivo es rodar especialmente los primeros 32 kms como máximo a 5'34''/km y como muy rápido a 5'30''/km. Estoy "flotando" y difrutando de la animación que es constante y diversa desdes el inicio. Llevo encima una "chuleta" con los tiempos de paso ideales cada 5 kms para cumplir mi objetivo, bajar de las 3 horas 55 minutos.Clavo los 3 primeros parciales en los kms 5 (27'30''), 10 (27'30") e incluso voy más deprisa en el  15 (27'14'').

Me planteo ser más prudente porque aún me queda más de la mitad , pero me lo estoy pasando tan bien y me veo tan fuerte que decido mantener el ritmo de crucero y seguir acumulando segundos a modo de "colchón" por si el final se complica.Caen los kms de forma implacable, vuelvo a clavar en el 20 (27'30''), paso la media maratón con un par de minutos de tiempo a favor.(1h 55'43'')


En el 25 saludo a Stefan y Ginés que han venido ha apoyarme a las puertas del territorio del "hombre del mazo", me paro para que me hagan una foto y me dicen que siga que estoy perdiendo tiempo.Yo les respondo que no me importa, Si me lo estaba pasando "teta", ahora ya me he dejado llevar del todo, el parcial en el km 25 no se resiente demasiado (27'36'') y en adelante a pesar de controlar de tanto en tanto mi garmin , me he dado cuenta que no sé cuando volveré a estar disfrutando de un evento de esta magnitud y vivir emociones de este calibre. Bailo con una voluntaria, salto y agito la cabeza con una versión de Ac/Dc, aplaudo los tambores de las batukadas...

Las piernas duelen desde hace un rato, pero es que ya me he plantado en el km 35, ¿Donde está el muro?, ¡aaaaaaaaah! claro en Berlín no hay muro , hace años que lo tiraron abajo.
Estoy aguantando el tipo, repaso mi tiempo y mantengo un remanente de tiempo más que suficiente para lograr mi objetivo sobradamente si no me hundo al final.

Estoy sorprendido de mi consistencia a estas alturas, las piernas empiezan a pesar, el cansacio se apodera de cuerpo y mente pero me mantengo en el umbral de ritmo previsto.Dicen que el maratón se corre 30 kms con la piernas, 12 con la cabeza y 195 metros con el corazón.Me planteo apretar un poco el ritmo pero decido esperar un poco más y no pasarme de "sobrado" porque hasta la cola todo es toro.

Cada zancada es más gratificante que la anterior he llegado al km 40 con posibilidad incluso de bajar de 3 horas 52 minutos si me doy caña de aquí al final.Acelero el ritmo, pero claro, entre que las piernas ahora si pesan mucho , no dejo de chocar manos del público y hacer gestos a todo bicho viviente,  la velocidad no se incrementa demasiado.

Entonces ves la puerta de Brandenburgo , te das cuenta de  que ya lo tienes hecho y te "meas" encima de la emoción , frenándote como queriendo que la fiesta no se acabe...Los últimos metros como siempre son los más bonitos en donde tu cabeza y tu corazón generan tal cantidad de sentimientos y emociones que hacen que todo lo sufrido para llegar hasta ese momento halla valido la pena y te enganches a la distáncia de Filípides.

Entrada en meta con el puño en alto y la palma de la otra mano abierta para celebrar 50 carreras y 5 maratones, cuando hace tres años con 28 kilos más y miles de cigarrillos, el reto del tridente maratoniano : Barcelona-Empúries-Berlin, era imposible ni de imaginar.

Además, 3 h 52'36'', nueva mejor marca personal , mejorando en más de 4 minutos la anterior y  pasándolo bien.





Medalla de finisher y coca-cola para reanimarse.





Muchas gracias a la familia y amigos que me apoyaron desde la distancia y durante la preparación allanándome el camino, a mis amigos en Berlín por su magnífica hospitalidad, a los "correcats" de los que siempre aprendo cosas nuevas y me animan siempre a seguir mejorando, a la climatología que fue perfecta para correr, al recorrido tan llano, al público venido de todas partes del mundo y que desde el primer metro no te deja desfallecer, a los voluntarios y animadores y en definitiva:

¡¡¡DANKE BERLÍN!!! Por haber regalado un día mágico a un humilde corredor popular.


El nuevo record del mundo la guinda a una maratón histórica de la que he formado parte.


                                                         Celebración Post-maratón.




  

 
 
 


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